Capítulo 455


    Aracelinzó una mirada intensa a Sabrina, sus ojos resndecían con una determinación feroz.


    -?Prefiero no tener nada antes que dejar a este asesino andar libre por ahí!


    André frunció el ce?o sin poder evitarlo.


    -Araceli, cálmate un poco.


    -?Cómo quieres que me calme cuando te han dejado así de herido? -Araceli replicó con los ojos llenos de lágrimas, mostrando un dolor genuino.


    -Araceli... -André abrió apenas losbios,o si quisiera agregar algo, pero Araceli, al borde de emoción, lo interrumpió.


    Con seriedad, Araceli lo miró fijamente-: André, el estudio lo podemos encontrar de nuevo, y para elpositor podemos pedir ayuda a un maestro. Puedo soportar cualquier humición, pero que a ti testimen, eso no lo puedo permitir.


    Sabrina se mantenía de pie en silencio, observando el intercambio cargado de emociones entre los dos. Susbios dibujaron una sonrisa hda.


    -Se?orita, si ahora decides no querer nada, significa que todo lo que André ha hecho por ti habrá sido en vano. Incluso herida que lleva por ti, habrá sido en vano. ?Estás segura de que quieres renunciar a todo?


    Araceli miró con frialdad.


    -?Cómo podría ser en vano? Me aseguraré de que recibas el castigo que mereces. Además, por André, estoy dispuesta a renunciar a todo.


    Aunques pbras de Araceli eran firmes, Sabrina sabía que lo que realmente había impulsado era el desafío que le habíanzado antes. Estaba dispuesta a perderlo todo solo para ganarle.


    Sabrina se permitió una risa breve.


    -Lamentablemente, lo que tú quieras no es lo importante. Lo importante es lo que el se?or Carvalho quiera hacer.


    Araceli, casi instintivamente, miró a André, pero vio que su mirada oscura y profunda seguía fija


    en Sabrina.


    Su corazón se hundió.


    -André, ?no estarás pensando en dejar ir a Sabrina, verdad?


    Los ojos de André briron un instante.


    -Araceli, el concierto es inminente, y tu condición física es incierta. Ya no tenemos tiempo


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    Capitulo 455


    para perder.


    Sabrina sonrió levemente hacia Araceli.


    -Se?orita, fíjate cómo André te quiere tanto, que ha soportado herida que le causé solo por ti. En otras circunstancias, nunca me habría dejado ir tan fácilmente.


    Araceli mordió subio inferior, sintiendo el sabor metálico de sangre. Sabrina estaba presumiendo su victoria. Antes, su "enfermedad" le había dado muchas ventajas. Ahora, se había convertido en su prisión.


    Respiró hondo, su expresión decidida.


    -No lo aceptaré.


    André habló con voz grave.


    -Araceli, no seas terca. Recuerdo que dijiste que amas música por encima de todo, que estarías dispuesta a renunciar a cualquier cosa por lo que amas.


    Araceli abrió boca, pero no pudo emitir sonido alguno. André había amado precisamente por su pasión y dedicación hacia música. Dejarlo todo por un capricho significaría destruir su propia identidad.


    André suavizó su tono.


    -Araceli, por favor, sal. Necesito har con Sabrina a ss.


    La mirada de Araceli se tornó en una mez de frustración y tristeza, pero no se atrevió a desobedecer a André. Con un último vistazo, salió de habitación.


    Una vez que Araceli se fue, atmósfera en habitación se volvió tensa y fría. Antes, e siempre tenía algo que decirle a André. Ahora, se encontraban en un silencio incómodo.


    Finalmente, fue André quien rompió el silencio.


    -?Estás tan segura de que no te haré nada?


    La respuesta de Sabrina fue ligera y despreocupada. -Sí, lo estoy.


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