Capitulo 608


    Capítulo 608


    Sabrina se frotó mu?eca. Aunque tenía un moretón que le rodeaba piel, al menos no tenía nada roto.


    -Ese tipo es muy peligroso -dijo Sabrina, mirando espalda de Fidel mientras se alejaba-. él no eso Nicolás; no se le puede tratar tan fácil.


    Fidel y Nicolás eran mundos distintos. Fidel realmente tenía el poder ens manos, podía mover recursos y personas a su antojo. Nicolás no llegaba ni a los talones de ese nivel.


    Dani también lo notó. Ese hombre no se parecía en nada a Fabián Guerrero ni a Nicolás.


    Todavía ahora, recordando forma en que Fidel miró hace un momento, se le erizaba piel.


    -?No deberíamos avisarle a Hernán? -preguntó Dani con caut.


    Sabrina suspiró.


    -Gabriel Castillo me contó que, aunque Hernán sigue siendo muy respetado en familia Casta?o, ya no tiene el control. El poder ya no está en sus manos.


    Fidel es quien manda ahora en el Grupo Casta?o. Incluso Hernán quizá no podría hacerle frente tan fácilmente.


    Además...


    Sabrina se quedó pensando un momento antes de continuar:


    -Hernán ya ha hecho demasiado por mí. ?De verdad vamos a pedirle que se enfrente a su propio hijo?


    Dani se quedó en silencio. No supo qué contestar.


    Sabrina miró con calma y trató de tranquiliza.


    -No te preocupes. Solo por mi rción con Hernán, Fidel no se va a atrever a hacerme algo... al menos por ahora. Si no conociera a Hernán, ya me habría ido mucho peor.


    Dani soltó el aire,o si hubiera estado conteniendo respiración todo ese tiempo.


    -Esta familia Casta?o... salvo Hernán, parece que no hay ni una persona decente.


    En ese momento, Jorge intervino:


    -Sabrina, tú tranqu. Aquí estamos en Cartagena. Fidel no puede hacer lo que le


    dé gana.


    -Mientras yo esté aquí, no voy


    dejar que te pase nada.


    Sabrina miró a Jorge y le sonrió, aunque su sonrisa era apenas un destello. -Gracias, Jorge.


    Jorge apretó el pu?o con fuerza, intentando ocultar emoción que sentía.


    -Aunque fuera solo por Thiago y André, no permitiría que alguien te maltratara. De pronto, Jorge cambió el tema.


    -Por cierto, Sabrina, ?qué te trajo a esta subasta?


    -Vine porque aquí está un cuadro que quiero mucho -contestó Sabrina.


    Jorge arqueós cejas, mostrando algo de sorpresa, pero luego sonrió.


    -Qué curioso, yo también vine por un cuadro.


    Mientras ticaban, Gabriel se acercó.


    -Escuché que había algo raro por aquí. ?Ocurrió algo?


    Al ver llegar a Gabriel, Jorge se despidió de Sabrina.


    -Sabrina, llegó tu amigo. Me retiro-dijo, y se alejó.


    Sabrina asintió levemente.


    Jorge no regresó al salón. En vez de eso, salió al jardín trasero y sacó su celr para hacer una mada.


    14:56


    Capitulo 608


    La mada se contestó casi de inmediato. Al otrodo, una voz ronca y desagradable rompió el silencio.


    -Vaya, no esún que me mes. ?Qué quieres que haga?


    Los ojos de Jorge briron con una dureza inusual bajo tenue luz del jardín.


    -Quiero que hagas algo en el carro de Fidel. Hazlo parecer un idente. Que nadie sospeche.


    -?Fidel? -repitió voz, subiendo el tono-. ?El próximo heredero del Grupo Casta?o? ?Estás seguro de que quieres meterte con él?


    La voz de Jorge, seca y cortante, no tenía nada que ver con su tono habitual.


    -Estuvo a punto de romperle mano. Pudo haberle destrozado vida.


    Hubo un momento de silencio.


    -Sí, si le hubiera arruinado mano, sería una lástima... Entiendo, ya sé qué hacer.


    Jorge estaba por colgar cuando voz volvió a sonar al otrodo.


    -No lo entiendo... ?solo porque de ni?a te ayudó por casualidad, eres capaz de arriesgarte así por e? ?Incluso contra alguieno Fidel?


    Jorge contestó con una tranquilidad apacible,o si hara del clima.


    -Sí. Pero, mientras más conozco, más seguro estoy: e lo vale.