Capítulo 594
Capítulo 594
-En unos a?os, después de que vida te dé unas cuantas liones, ya no vas a ser tan ingenua.
Las puertas del elevador se abrieron poco a poco. Sabrina estaba a punto de entrar, cuando vio que una figura salía disparada de adentro.
-?Dani sco? -Sabrina miró sorprendida. ?A dónde vas tan apurada?
En ese instante, una silueta alta y delgada también salió del elevador.
Sebastián intervino:
-Dani intentó marte varias veces, pero nunca pudo contactarte. Así que rastreo tu carro, vio que seguía parado en el mismo sitio y se preocupó por ti. Ya íbamos a salir a buscarte.
Dani, al ver que Sabrina estaba bien, por fin respiró tranqu.
-Me enteré de lo de tu cuadro y quise marte para contarte... pero tu celr nunca contestó. Con lluvia tan fuerte allá afuera, de verdad temía que te hubiera pasado algo.
Sabrina sacó su celr y apenas entonces notó que, quién sabe desde cuándo, se había quedado sin batería y se apagó.
Había estado tan ocupada últimamente que, entre tanto pendiente, noche anterior olvidó ponerlo a cargar.
-Estoy bien -explicó Sabrina-. Lo que pasó fue que mi carro se depuso a mitad de camino.
Sebastián observó chaqueta que Sabrina llevaba sobre los hombros.
-?Y cómo hiciste para regresar?
Sabrina no ocultó nada.
-Me encontré a André y Araceli en el camino.
Les resumió lo ocurrido en pocas pbras.
Dani gru?ó en voz baja:
-Qué m suerte.
Luego, apurada, le dijo:
-Sabrina, súbete a darte una ducha, no vaya a ser que te enfermes.
-Va.
Ya en el estudio, Sabrina empujó puerta de su área de descanso, buscó ropa limpia y se fue a ba?ar.
Cuando salió del ba?o, encontró una taza humeante de té de jengibre sobre
mesa.
un calorcito en el pecho.
Sintió
Dani siempre tan atenta.
Sabrina bebió el té de un trago y, poco a poco,
cuerpo
se
le fue calentando.
Al salir del cuarto, vio a Dani con unas hojas en mano, ticando con Sebastián.
Sabrina se acercó.
-Dani, gracias por prepararme el té de jengibre.
Dani levantó mirada y sonrió:
-No fui yo, fue Hache quien te lo hizo.
-?Hache? -Sabrina volteó a ver a Sebastián, sorprendida.
Sebastián contestó:
-En el estudio no hay mucho que hacer. Estoyiendo, durmiendo aquí y encima me pagan, me siento raro. Dani pensaba contratarte un asistente, pero
si igual no tengo mucho que hacer, puedo encargarme de estos detalles.
10:00
Udpitulo 294
Sabrina se quedó pensando y luego asintió suavemente.
-Entonces, te lo encargo.
Uno, cuando tiene tiempo libre, hasta se inventa pendientes.
Así que no estaba mal darle a Hache algo que hacer.
Sin darle más vueltas al asunto, Sabrina miró a Dani.
-?Y eso de que sabes algo sobre pintura?
Dani asintió y le pasó unos papeles.
-Sabrina, checa esto. ?Es tu cuadro?
Sabrina tomó los documentos, los revisó y sus ojos se iluminaron.
-Sí, es ese. ?Dónde está ahora?
-Ese cuadro se subastará el próximo fin de semana -dijo Dani.
-?Subasta? -Sabrina quedó atónita-. ?Cómo acabó en una subasta?
Dani le pasó otro papel.
-Mejor léelo tú misma.
ma 15
Sabrina bajó mirada, leyó hoja y su expresión se transformó en asombro.
Ens oficinas del Grupo Casta?o.
Nicolás irrumpió emocionado en una oficina.
-?Tío, ya tenemos noticias del cuadro que estabas buscando!
10:00