Capítulo 226


    Sin embargo, en estos tiempos, divorciarse es realmente dificil. El abogado ya le había dicho más de una vez que, si era posible, el divorcio por acuerdo mutuo era forma más rápida y digna de separarse. Si se seguía el procedimiento legal, solo revisión por parte del tribunal generalmente tomaba seis meses. Si además quería dividir los bienes, dadaplejidad del patrimonio de familia Carvalho, podría extenderse hasta nueve meses.


    Y antes de abrir el caso, ambas partes tendrían que pasar por una mediación, lo cual tomaría al menos un mes. Si mediación fracasaba, entonces se podría presentar el caso formalmente.


    El abogado le explicó de manera sutil:


    -Llegar al tribunal, incluso si ambos finalmente aceptan el divorcio,o tienen un hijo y el se?or Carvalho no haetido ninguna falta grave, lo más seguro es que no se lo concedan.


    -Ya sé que suena increíble, pero así sons cosas. Llevo a?os con casos de divorcio y he visto muchas situaciones parecidas.


    -Se?orita Ibá?ez, si quiere divorciarse pronto, lo mejor es llegar a un acuerdo.


    Sabrina preguntó:


    -?Las pruebas que tengo pueden demostrar que él tuvo culpa en el matrimonio?


    El abogado negó con cabeza.


    -Primero, esas pruebas no demuestran que le fue infiel.


    -Incluso si realmente fue enga?ada... en principio, eso no afectaría división equitativa de los bienes.


    -A menos que lo sorprenda en el acto o los encuentre viviendo juntos y presentándoseo esposos, lo que sería bigamia, podría obtener algo más.


    -Pero que él se quede sin nada, eso es imposible.


    Antes de intentar divorciarse, Sabrina no había imaginado que ley de divorcio funcionaría así. Fue hasta este momento queprendió que eso de que "los malos reciben su merecido" es solo un cuento embellecido. La realidad es que los malos no siempre pagan por sus iones, y quizás incluso vivan mejor.


    Media hora después, Sabrina llegó al hospital. Ya había averiguado a través de Dani el número de habitación de Araceli. El ascensor subió lentamente hasta el último piso.


    Sabrina acababa de salir del ascensor cuando dos guardaespaldas, uno a cadado de puerta, detuvieron.


    -Lo siento, se?orita Ibá?ez, este piso está reservado, no se permite entrada de personas sin autorización.


    Capitulo 226


    Sabrina se detuvo.


    -?Quién lo reservó?


    Parecía que los guardaespaldas ya tenían instriones y no ocultaron nada.


    -Fue el se?or Guerrero.


    "?Fabián?"


    Fabián realmente estaba haciendo todo lo posible para evitar que e encontrara a André, incluso había reservado todo este piso. Sabrina echó un vistazo hacia el pasillo y vio que en entrada des escaleras también había dos


    guardaespaldas. Era evidente que estaban allí para evitar que e subiera por esa vía.


    Sabrina sonrió sin decir nada más, y se dio vuelta para irse. Fabián haría todo lo posible para asegurarse de que hoy no pudiera ver a André.


    Sabrina no se quedó en el hospital, sino que regresó directamente a casa. Sabía que Fabián enviaría a alguien para vig, y si e permanecía en el hospital, él se aseguraría de que André no saliera por ninguna puerta.


    Al abrir puerta, Dani estaba sentada en el sofá del salón. Cuando vio su expresión de disgusto, se hizo una idea de lo que había pasado.


    -?Otra vez André te dejó ntada?


    -Sí-Sabrina asintió, cansada-. Pero principal razón fue Fabián.


    -?Fabián?


    Sabrina le explicó toda situación a Dani.


    Dani no pudo evitar exmar:


    -?Ese Fabián es un desgraciado!


    Sabrina se dejó caer en el sofá.


    -Ma?ana volveré a contactar a André para programar otra cita. No creo que


    Araceli esté enferma todos los días.


    Dani maldijo a Fabián un poco más, pero luego recordó por qué estaba allí. Con una sonrisa radiante dijo:


    -?Ah, Sabrina, vine a contarte una buena noticia!