Capítulo 216
-Thiago, si te dejas manipr con tanta facilidad, deberías ntearte qué está pasando contigo. ?Por qué no tienes ni un poco de sentidoún para protegerte? No quiero que un día alguien te secuestre y ya sea demasiado tarde paramentarlo.
Sabrina interrumpió su discurso abruptamente y encaró a André, su rostro transformándose en una mueca sarcástica que revba todo su desprecio acumdo.
-Ah, olvidaba algo importante. Tú jamás tementarías, solo buscarías a quién culpar. Prefieres criticar los esfuerzos ajenos antes que realizar el más mínimo esfuerzo propio. André, itu arrogancia no tiene límites!
André permaneció impasible ante aque avncha de reproches.
-Sabrina, creí que me maste porque te arrepentías de algo. Si solo me trajiste para escuchar tonterías, mejor ahorrate el esfuerzo.
Sabrinaprendió futilidad de sus pbras. Las personas atrapadas en su propia burbuja jamás reconocen sus errores; incluso ante evidencia más contundente, fabrican justificaciones que los exoneran.
-Te mé para decirte dos cosas. Primero, es un hecho que Thiago empujó a Romeo algo. Tiene que disculparse con Romeo. Y tú,o tutor de Thiago, también debes disculparte con sus padres.
André entreabrió losbios, pero finalmente guardó silencio.
Había revisado meticulosamente grabación de seguridad. Independientemente de intencionalidad, durante el forcejeo entre los ni?os, Romeo cayó al agua.
En cuanto a Thiago...s imágenes mostraban con ridad meridiana que él mismo saltó voluntariamente; resultaba imposible culpar a terceros.
Aunque André no simpatizaba con Gabriel ni con Romeo, tampoco era de aquellos que
defienden ciegamente a sus hijos ignorando realidad.
-Cubriré todos los gastos médicos del ni?o y proporcionaré cualquierpensación necesaria -deró André con tono neutral.
Sabrina no manifestó sorpresa ni satisfión ante esta respuesta.
Thiago no era Araceli, y ante pruebas irrefutables, André no lo defendería a
ultranza.
Sabrina experimentó una emoción ambigua, entre alivio y desencanto.
-Hay un segundo asunto -continuó Sabrina, mirando directamente a los ojos de André-. Aceptos condiciones de irme sin remar bienes. André, ?cuándo formalizaremos el divorcio?
André mostró un destello de sorpresa que rápidamente transmutó en una sonrisa desde?osa.
Capitulo 216
-?Divorcio? ?Estáspletamente segura?
Sabrina podía leer perfectamente sus pensamientos y esbozó una sonrisa tenue.
-?Que si estoy segura?
André arqueó una ceja y habló con fingida despreocupación.
-?Esta vez no exigirás mitad de mi patrimonio?
Evidentemente, André interpretaba su peticióno una estratagema para obtener mayores beneficios.
-Si yo quisiera remar mi parte, ?tú me concederías? -cuestionó Sabrina.
André observó con una mueca de ironía calcda.
-?Y si me niego a darte algo, renunciarás al divorcio?
-Parece que el se?or Carvalho tiene problemas auditivos. Acabo de afirmar que acepto irme sin nada -replicó Sabrina.
André esbozó una sonrisa apenas perceptible.
-Entonces, ?cuáles son tus verdaderas condiciones esta vez? ?Piensas utilizar el
medicamento de mi madreo moneda de cambio, o tal vez anhs custodia de Thiago? ?O existe alguna otra exigencia que no estoy contemndo?
Los ojos brintes de Sabrina se encontraron con los de André, que destban un sutil matiz burlón, y e respondió con una sonrisa lenta y deliberada.
-Si quisieras otorgarme custodia de Thiago, no me opondría. Después de todo,
el gran se?or Carvalho vive tan absorbido por sus ocupaciones que ni siquiera puede supervisar a un ni?o de
cinco a?os.
-Respecto a tu madre... resultaría sumamente imprudente denunciar a tu propia madre por secuestrar a tu hijo.
-Una familia con semejantes dinámicas difícilmente proporcionará una educación adecuada.
-Por supuesto... -Sabrina realizó una pausa estratégica antes de modificar su entonación-. Si prefieres no concedérmelo, tampoco insistiré. Bastará con que ma?ana me pa?es al registro civil para concluir el trámite de divorcio; no solicitaré absolutamente nada.
Sabrina sostuvo mirada prante de André.
-André, ?vendrás?