Capítulo 174
-Quiero dejarlo bien ro: ?entre todos los padres presentes en esta
Las pbras de Fabián reverberaron en el salón con arrogancia desmedida. La multitud permaneció en silencio, con expresiones atónitas en sus rostros. Nadie se atrevió a confrontarlo. El Conservatorio de Música Santa Victoria de Chile gozaba de un prestigio indiscutible en los círculos culturales. Muchos herederos de familias acauddas, tras obtener resultados mediocres en su país, habían intentado pulir su formación en el extranjero, pero ni siquiera consiguieron traspasar el umbral de aque institución. Era un recinto que rechazaba sobornos y se dedicaba exclusivamente a cultivar talentos auténticos.
Los presentes, todos versados ens dinámicas de alta sociedad, interpretaron rápidamente situación. No era más que clásica historia de André favoreciendo a su amante por encima de su esposa legítima, provocando que incluso su suegra y toda familia despreciaran. Este tipo de drama era un guion conocido que ya no causaba sorpresa alguna. Aunque situación de esposa resultabamentable, exceptuando su belleza, parecía carecer de otros atributos
destacables.
No podía negarse que esposa poseía una belleza extraordinaria, con rasgos clásicos y un porte distinguido. Incluso en los selectos círculos de alta sociedad, su belleza resndecía con luz propia. Si Fernanda no hubiera revdo sus orígenes, todos habrían asumido que era una dama de alcurnia. Sin embargo, en los círculos exclusivos,s mujeres hermosas abundaban. Confiar únicamente en belleza resultaba insuficiente para mantener el interés de un esposo. Con el paso del tiempo, hasta el rostro más bello podía volverse monótono.
Y joven que André había elegidoopa?era, aunque no iguba belleza de esposa original, poseía un talento excepcional. Ambas contaban con educación superior, pero ?quién preferiría a una mujer hermosa pero sin bagaje cultural con quien resultara imposible sostener una conversación estimnte? No sorprendía que André se inclinara por joven talentosa. Además, ostentaba un título del prestigioso Conservatorio de Música Santa Victoria. Sin considerar factoreso alianzas familiares, su nivel educativo bastaba para asegurarle un matrimonio en una familia adinerada. Casarse en un entorno culto donde el linaje no fuera primordial resultaría aún más sencillo. ?Acasopetir con e en su especialidad no constituía un acto de humición propia?
-?Graduada del Conservatorio de Música Santa Victoria? ?Estamos ante una verdadera experta? entó alguien entre multitud.
-?Ay! -suspiró otra voz con resignación-. Parece que el primer lugar de hoy ya tiene due?o: familia Carvalho.
-Yo también so?aba con que mi hijo se llevara el oro... pero ahora conformarnos con el podio sería un mgro.
-Los jueces, al conocer semejante currículum, ?quedarán boquiabiertos! Seguro le ofrecen el
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primer lugar y hasta invitan a formar parte del jurado.
-ro, ?cómo van a atreverse esos jueces a calificar a alguien de su calibre?
Algunos oportunistas intentaron acercarse a Fernanda con fingido interés.
-Oye Fernanda, ?qué instrumento domina e? Estoy considerando contratao maestra para mi hijo.
-Fernanda, ?ahora valoras más el talento que el linaje? Con el imperio que ha construido el Grupo Carvalho, ya no necesitas obsesionarte tanto con los apellidos.
-?Vaya, André sabe reconocer una joya cuando ve!
Araceli, quien momentos antes contenía lágrimas,enzó a exhibir una sonrisa ante los hgos de multitud. La naturaleza humana tiende a inclinarse hacia quien aparenta vulnerabilidad. E había perfionado el papel de víctima para despertarpasión. Jamás imaginó que llegaría el día en que elogiarían por sus propios méritos. Reflexionando sobre esto, Araceli dirigió a Sabrina una mirada despectiva cargada de satisfión.
De pronto, una risa cristalina pero hda cortó el murmullo de adción que invadía s.
-Yo no estoy de acuerdo -pronunció Sabrina con voz serena y firme que resonó en el repentino silencio.
-?Te gustaríapetir conmigo? -desafió mirando directamente a los ojos de Araceli.
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