17kNovel

Font: Big Medium Small
Dark Eye-protection
17kNovel > La Guerra de una Madre Traicionada > Chapter 161

Chapter 161

    Capítulo 161


    Sabrina lo miró fijamente, sosteniendo aque mirada que se había vuelto tan distante con el paso de los a?os.


    -Si pudiera mantenerlo, ?me lo darías?


    André rechazó con un gesto tajante, sin ninguna vión en su voz.


    -Ni lo sue?es.


    Sabrina elevó su mirada, estudiando aquel rostro de rasgos definidos que alguna vez había amado con intensidad, buscando en él algún vestigio depasión.


    -?Y si te digo que lo quiero sin importar el costo?


    La respuesta de André surgióo untigazo, calcda para herir en lo más profundo.


    -Sabrina, si intentas arrebatarme a Thiago, no tienes ni más mínima oportunidad.


    -ro, cómo no-respondió Sabrina con amarga ironía-. Aunque llevemos esto ante un juez, solo soy una ama de casa sin ingresos propios. Ningún tribunal me daría su custodia.


    Sabrina vó su mirada directamente en los ojos de André, aquellos ojos que ya no miraban


    -Mira, renuncié a mi carrera para cuidar a nuestro hijo, me convertí en ama de casa por él.


    -Y ahora resulta que por no tener trabajo ni ingresos estables, no puedo obtener su custodia, y eso se vuelve el arma perfecta para atacarme.


    -Todo lo que hace una ama de casa no vale absolutamente nada para ustedes. -André, ?todavía piensas que este ni?o también me pertenece?


    Si tuviera alguna posición social o respaldo económico, quizás podría remar el derecho de estar junto a Thiago. Pero Sabrina estabapletamente s, sin nadie que apoyara, y Fernanda Rivera jamás había aceptadoo parte de familia. Tras el divorcio, su hijo prácticamente dejaría de tener rción con e. Especialmente ahora que Thiagoenzaba a alejarse, quizás hasta sentiría vergüenza de teneo madre.


    Desde luego, Sabrina no expresaba esto porque realmente quisiera pelear por custodia de Thiago. Sabía perfectamente que no tenía posibilidad alguna de ganar. Desde el momento en que decidió marcharse, había aceptado que se iría sin llevarse nada. El acuerdo de divorcio que había presentado originalmente estipba que se marcharía sin exigencias. Si André lo hubiera firmado, todo habría concluido sin másplicaciones. Pero no solo se negó a firmarlo, sino que Araceli continuaba apareciendo en su vidao una sombra persistente. Cualquier persona, por tranqu que fuera, perdería paciencia ante tanta provocación, y ellos tratabano si fuera invisible. Si ellos no jugaban limpio, e tampoco tenía por qué hacerlo.


    122


    15:41


    André se quedó sin argumentos. Frente a una Sabrina tan determinada, sintió una profunda inquietud creciendo en su interior. Erao si algo importante se le estuviera escapando entre los dedos.


    -?Y si me niego rotundamente al divorcio? -preguntó con voz gélida.


    Sabrina mantuvo su expresión imprable,o una máscara perfectamente colocada.


    -Es mejor separarnos en buenos términos, aunque solo sea por Thiago. No quiero que esto se convierta en un circo mediático.


    -André, tampoco querrás que los periódicos nos vean protagonizando un melodrama lleno de pleitos, ?o sí?


    Andréprendía que, con Gabriel respaldánd, Sabrina tenía capacidad de generar un escándalo de proporciones considerables. Un conflicto matrimonial público podría afectar seriamente el valor des iones de empresa. Y para Thiago, semejante exposición resultaría devastadora.


    Los ojos de André parecían dos pozos insondables, oscuros y aparentemente tranquilos.


    -Sabrina, ?has considerado lo que pasaría si llegas a provocar mi ira?


    -No me importans consecuencias -respondió Sabrina sin mostrar temor alguno-. Si ya renuncié a mi hijo, ?con qué más podrías amenazarme?


    De pronto, Andrénzó unentario aparentemente casual.


    -Marcelo nco y Dani sco son tus amigos, ?no es así?


    Sabrina esbozó una sonrisa calcda.


    -Marcelo y Dani son personas fuertes y resistentes, pueden soportar cualquier cosa. Pero tu querida Araceli... haciendo cuentas, le quedan unos cinco meses de vida.


    Sabrina pareció hacer memoria repentinamente.


    -Ah, sí, recuerdo que el último deseo de tu noviecita era ofrecer un concierto, ?no? Me pregunto si ese concierto podrá realizarse sin contratiempos.


    André captó inmediatamente amenaza vda ens pbras de Sabrina. Con una mirada cial, le advirtió:


    -?Sabrina, si te atreves a hacerle algo a Araceli, jamás te lo perdonaré!


    Sabrina dirigió su mirada hacia los documentos del divorcio que yacían sobre


    mesa.


    -Firma esto, y lo que tanto temes no ocurrirá.


    212
『Add To Library for easy reading』
Popular recommendations
The Wrong Woman The Day I Kissed An Older Man Meet My Brothers Even After Death A Ruthless Proposition Wired (Buchanan-Renard #13)